Un argumento que se esgrimió contra la teoría de Darwin hasta los años cuarenta del siglo pasado y que aun esgrimen los creacionistas de los EEUU es que las estructuras incipientes no podrían funcionar, que, por ejemplo, un cuarto de ala no funcionaria. Darwin ya respondió adecuadamente a esa objeción: las estructuras incipientes tendrían funciones distintas de las estructuras desarrolladas. En el caso de las alas, ya hace décadas que una serie de experimentos probó que un diez por ciento de ala en los antepasados de los insectos tendría, no una función relacionada con el vuelo, sino con la termorregulación, mejorando la captación de calor.
En cuanto a las alas de las aves, también hace décadas que Ostrom propuso que las alas incipientes no tenían función voladora, sino de captura de insectos golpeándolos y recogiéndolos. La idea es plausible, pero Ostrom no adujo pruebas suficientes.
En las últimas décadas, ha habido una profusión de descubrimientos de dinosaurios con plumas y lo que parecen rudimentos de alas que, en cualquier caso, no les permitirían volar, por su pequeño tamaño y por la estructura de sus plumas. Ostrom no se refería principalmente a esos dinosaurios emplumados sino a Archaeopteryx, la primera ave conocida. Sus alas no permitían el vuelo, aunque tal vez si algún tipo de planeo de corto alcance para bajar de los arboles. En cualquier caso, las protoalas de los dinosaurios emplumados aun serian más inútiles para el vuelo, así como para el planeo.
Un equipo formado por paleontólogos, biólogos e ingenieros trató de averiguar para qué servirían las protoalas y las colas emplumadas de esos dinosaurios https://doi.org/10.1038/s41598-023-50225-x. Sabiendo que diversos grupos aviares usan una estrategia predadora de insectos mediante la persecución de estos después de hacerles salir de sus escondites en el suelo mediante exhibiciones con las alas y la cola desplegadas de improviso, estudiaron el comportamiento de ortópteros saltamontes y langostas ante esas exhibiciones. Muchos saltamontes están provistos de circuitos nerviosos que hacen responder al animal saliendo del escondite para huir ante esas exhibiciones, momento en el cual son vistos y perseguidos por el depredador. Los autores del trabajo se centraron en los ortópteros porque coexistieron con varios de los dinosaurios emplumados.
Construyeron una réplica robótica de uno de ellos, Caudipteryx, que se desplazaba mediante unas ruedas y podía desplegar las alas y la cola a la manera de algunas aves actuales. Con él consiguieron acciones de escape de saltamontes mucho más frecuentes con las posiciones de exhibición que con otras.
Diversidad de aves perseguidores al ras, presas con vías de escape neuronales simples y el robot Caudipteryx utilizado en experimentos de comportamiento. De la A a la F Ejemplos de perseguidores de descarga: Rhipidura leucophrys, Geococcyx californianus, Cercotrichas galactotes, Tapera naevia, Myioborus pictus, Myioborus miniatus, respectivamente. G Distribución de los perseguidores entre 248 familias de aves, mostrando que esta estrategia está muy extendida en diversos taxones de aves. H El dinosaurio robótico "Robopteryx" en su hábitat natural colocado frente a un saltamontes. I Representación artística de la hipotética exhibición al ras de un dinosaurio emplumado. J Oedaleus infernalis, la especie utilizada en los experimentos. K Neuronas detectoras de telares LGMD/DCMD implicadas en el desencadenamiento de respuestas de escape a estímulos visuales en ortópteros. [Figuras y texto proceden del articulo comentado]
Esto, naturalmente, como advierten los autores, no constituye ni prueba ninguna hipótesis, pero sí que puede inspirar hipótesis, observaciones y experimentos que lo hagan. Y pone de manifiesto que Darwin sabía lo que se hacía al responder a sus objetores que las estructuras incipientes no tenían por qué haber servido a sus poseedores para las mismas funciones a las que sirven las estructuras desarrolladas de sus descendientes. Lo cual, por cierto, es una regla de las ciencias que tienen que ver con la historia. Por ejemplo, la función del tabú del cerdo entre los judíos primitivos y los primeros musulmanes no es la que tiene entre los judíos y musulmanes actuales: en el primer caso, al parecer, tenía que ver con la ecología; en el segundo, con la identidad.
Los autores del trabajo se extienden también en suposiciones basadas en algunas especies de aves respecto de la mayor eficacia de estas estrategias mediante la coloración de las plumas. Son suposiciones interesantes, pero, mientras no sepamos, como no sabemos, nada de la coloración de las plumas de los dinosaurios, lo cual, si aluna vez llegamos a conocer los fósiles no conservan los colores, en la medida que son simples huellas de las plumas, no parece que vaya a ser en un tiempo previsible.
Mayo de 2024